Las islas son un espacio estupendo para cocinar, preparar alimentos, y sirven como un almacenaje adicional en la cocina.
Los contras es que se necesita una cocina bastante amplia para poder diseñar una isla efectiva.
Veamos que truquillos vendrán bien para conseguir una isla funcional y práctica...
PUNTO 1. PARA QUE LA VAS A USAR? Tienes que decidir que uso quieres darle, de este modo en las islas se puede colocar el espacio de cocinar (la placa y, por lo tanto, la campana), zona de lavado (el fregadero), o simplemente ampliar el espacio de preparado de alimentos. En estas decisiones es muy importante tener en cuenta las instalaciones, tomas de corriente, de agua y salida de humos.
Pero no pares ahí, en una isla bien diseñada se puede hacer mucho más. Puedes comer en ella, socializar, trabajar o estudiar, los deberes de los niños... La verdad es que puedes hacer lo que quieras y es muy muy práctica.
¿QUE ESPACIO NECESITO? Sí, las islas nos gustan a casi todos, pero no todas las cocinas son viables a la hora de colocar una cocina, menos de lo que quisiéramos me temo...
Para empezar, la superficie de la encimera debe ser lo suficientemente amplia para que el cocinado sea cómodo. En los modulares de Ikea el fondo del mueble es de 60 o 37cm. en este caso, 97cm. sería suficiente para hacerla practicable. O si lo prefieres podemos colocar un módulo de 60 con un voladizo de 37cm. que hará las veces de barra, y consigue amplitud.
La longitud dependerá del diseño de la cocina, si es de tipo cuadrada y más grande, o si la quieres alargada en forma de barra. Ten en cuenta que la circulación en la cocina se hará alrededor de ella y debe ser cómodo.
Y lo más importante, debes de dejar un espacio libre de 120cm. para que sea practicable (mínimo 1 metro). Recuerda siempre que la isla debe adaptarse a la cocina y no la cocina a la isla.
DIFERENTES DISEÑOS.
En cuanto a su diseño, hay muchas opciones, como comenté antes, puedes crear un voladizo que haga las veces de barra, dejando el espacio libre para las piernas.
Otra opción es crear dos niveles, de esta manera el espacio de trabajo quedará en una zona, y la otra zona, en nivel bajo, puede usarse como zona de comedor.
No tienen por qué ser módulos cerrados de almacenaje, puedes colocar huecos de almacenaje que se pueden usar a modo de estantería.
OTRAS OPCIONES.
Si te encantan las islas pero en tu cocina no es viable, puedes buscar otro tipo de soluciones.
Por ejemplo, en IKEA disponen de barras ya fabricadas donde podrás trabajar cómodamente y pueden hacer las veces de isla.
Si no te gusta esta opción, siempre puedes recurrir a las penínsulas, que necesitan mucho menos espacio libre en la cocina, o simplemente colocar una pequeña barra pegada al tabique que de continuidad a la encimera de la cocina.
Y recuerda, lo más importante es la comodidad de tu cocina mientras se está en ella, sentirte bien moviéndote en el espacio y lo más importante, disfrútala!
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